sábado, marzo 01, 2008

Salado

El olor a vacaciones que ya se acaban tiene algo medio salado, incluso medio marino, me atrevería a decir; que se contrapone con una humedad cada vez más seca, y una desazón del alma, del espiritu, como una vela que se apaga poco a poco. Creo que ocurre especialmente cuando tus vacaciones han tenido absolutamente cero conexión con tu año académico, partiendo por la gente, por los ambientes, por los lugares, por los aromas, por los sonidos, por las emociones, lo aprendido, las experiencias y los recuerdos. Es como si hubiese tomado todo el año pasado hasta, digamos, diciembre, lo hubiese metido todo en una bolsa Ziploc (totalmente hermético) y ahí se hubiese quedado, en el fondo de mi clóset.

Anoche me plantearon un desafío, sobre el cual no voy a profundizar en este momento, pero sí procedo a tomar un paso importantísimo: creo que, por esta vez, lo que iría en este cuadro de texto, mejor irá a una hoja de algún color bonito, escrito con lápiz de algún otro color. Tengo buenas ideas que no quiero desaprovechar, menos con ese desafío presente... un desafío de los más agradable y lindo, por cierto!

1 comentario:

Sο℘hï∃ ℘ℜyℵ dijo...

Mira nada más que interesante XD...

Al menos yo empiezo a sentir de nuevo el olor a vacaciones y es suficiente motivo para sonreír, jeje...

Suerte con tu desafío... que suponmgo que a estas alturas ya llevarás algo avanzado!

Buena vibra!!