jueves, noviembre 29, 2007

God put a smile upon your face...

Ayer, cuando venía en la micro de vuelta a mi casa, saliendo de un exámen que había sido ridículamente más fácil de lo que esperaba, me dí cuenta de algo bastante desalentador: de todas las personas que íbamos en la micro (y los que conocen el Transantiago comprenderán que no éramos pocas), las únicas que íbamos sonriendo eramos una pareja y yo. Nadie más. Miré alrededor, y no pude encontrar otra sonrisa. Iban amigos conversando, una mujer con un compañero de trabajo o qué se yo que como que se querían abrazar pero no, y aún así nadie sonreía. Y yo me sentía tan bien..! Tan bien por cosas tan ínfimas. Me sentía bien porque era un exámen menos, porque la canción que Lisandro Aristimuño me cantaba en el oído era triste, pero muy linda, porque no iba tan apretada como podría ser, porque el día estaba agradable, qué se yo. Estaba feliz, y cuando estoy feliz, sonrío. Y me extrañó que nadie más sonría, siendo que más de alguno debe haber tenido aunque sea un motivo mínimo para hacerlo. Los que iban sentados podían sonreir porque habían alcanzado asientos; los que iban de pie podían sonreir porque no íbamos tan apretados como otras veces, o no sé, acordarse de algo, de alguien... y está bien, son las 20:30, la gente está cansada, pero yo también estoy cansada, y sé que me seguiré cansando, pero eso no me quita el derecho a sonreir si me siento bien.

No sé. Me hace pensar en que tal vez lo que le falta a Santiago para dejar de ser tan gris, es que la gente sonría un poco más seguido.

domingo, noviembre 25, 2007

What goes around...

Bueno, y después de la desesperación del post anterior viene la calma. La calma, porque acabo de recibir una noticia -dígase una nota- que daba por caso perdido, pero terminó subiendome demasiado el ánimo. Y eso es bueno, porque me hace pensar en que no todo está perdido, y que a veces a través de mis ojos ennegrezco mucho las cosas. Extrañamente, los dos días que han pasado desde que escribí lo último han sido infinitamente mejores, o mejor dicho me han dado mucha luz. Una luz verde que me hace creerme el cuento de que puedo lograr todo lo que me proponga. Y espero que esa luz dure muchísimo, pero en especial hasta el sábado que es el día en que sanseacabó.

Open the windows, pull on the brake chords,
open the flood gates, pull up the shades,
turn on your engines with all the vengeance,
'cause I got something I'd like to say
I've only got a buck in my pocket,
but it feels like I own the world
I've only got a buck in my pocket,
but it feels like I own the world;
push your luck...

Circle the wagons, seduce the dragons,
tell all the customers they can wait,
there's something oozin' through my delusion,
here's the conclusion I reached today:
I've only got a buck in my pocket,
but it feels like I own the world
I've only got a buck in my pocket,
but it feels like I own the world...

So warn all the tall clouds, tell'em to watch out,
they're gonna blow like autumn's today,
here lies the vestige, some writer's message
who kindly asked if I could relay:
I've only got a buck in my pocket,
but it feels like I own the world
I've only got a buck in my pocket
but it feels like I own the world...




edit
: ...y me acabo de dar cuenta de que escribo ésto 5 días después, no 2. El cálculo tiene una capacidad impresionante para modificar tu percepción del tiempo.

martes, noviembre 20, 2007

El mundo en la contra.

Por muy cliché y pre-adolescente que pueda sonar, es la verdad: el mundo siempre elige los peores momentos para ir en tu contra. Hasta en los detalles más mínimos, pero que ponen los nervios de punta. Porque cuando estás al borde de echarte un ramo (ahora dos, gracias mundo!) es cuando las páginas web no funcionan, no te suben las notas que faltan, los auxiliares no suben las salas hasta el mismo día del exámen (y cuando uno opina humildemente que es una irreponsabilidad, te echan la puteada por el foro), promesas que no cumplen (bleh), el calor de mierrrrda que no me deja pensar en paz y me desespera aún más, la semana de mierda que viene y que lo único que quiero es que pase rápido.

Y sé que idiotizarse no ayuda mucho, pero me idiotizo. Me idiotizo porque lo que podría ayudarme a que éstos días fuesen más fáciles, tampoco resulta. Y entonces empieza el círculo vicioso.

domingo, noviembre 11, 2007

Hojas.

Lo bueno de no escribir en mucho tiempo, es que después tengo un montón de cosas para escribir. Lo malo es que son tantas que 1. Me da lata escribirlas, y 2. Se me empiezan a escapar detalles importantes y al final escribo estupideces.

Al final da lo mismo. No pretendo -ni nunca pretendí- que ésto fuese un registro lineal de la linealidad de mi vida. Pero han estado pasando muchas cosas, las últimas semanas han sido de mucho movimiento y sinceramente no recuerdo la última vez que pudimos sentarnos tranquilamente a ver alguna película, o echarnos tranquila y patafísicamente sin hacer nada. Creo que, tiempo libre que he tenido, ha sido tiempo libre con algo por hacer. Y no me quejo, en lo absoluto, puesto que la mayor parte de las cosas por hacer han generado bastante entusiasmo de mi parte, principalmente digamos porque han sido cosas distintas. Y como ya mencioné, ha sido movimiento puro. O por lo menos, esa es la sensación que tengo de las últimas semanas: imágenes rápidas, como fotos borrosas que pasan por mi mente mientras escribo. Pero ha sido un fuerda-de-foco entretenido, ágil, disfrutado y necesario. Lo he pasado muy bien.

Espero que el movimiento continúe. Estoy a una semana del final, y a cuatro del verdadero final, y quiero reventar en colores en mitad de la noche, en música fuerte, en luces y en risas, en momentos. Quiero almacenar infinitos momentos, almacenarlos como colores en una caja negra. Y abrirla cuando a mi corazón le falte color y le falte luz.
Me estoy dando cuenta de cosas. De quién quiero ser, de quien no quiero ser; de quiénes, de qué tipo de gente me quiero rodear. De que me gusta como funciona mi mente, de que me gusta el camino que sigo. De las cosas que realmente quiero, y de las que realmente me molestan y me desagradan en la gente que me rodea. No voy a dar ejemplos, son sólo ciertas conductas en ciertas personas que valoro en cierta medida, y que me hacen cuestionar el por qué.

[ Lisandro Aristimuño Humo sobre el mar ]

lunes, noviembre 05, 2007

Lucky&shit

  • Un año y diez meses (L)
  • Ver a Starsailor, Travis y The Killers desde cancha vip omg
  • Encontrarme luca en el bolsillo
  • Que una mina x me regale cigarros
  • Encontrarme un par de lentes de sol casi iguales a los que se me rompieron
  • Torta :D