Ayer, el alcalde de Puerto Aisén manifestó molesto que la Mandataria y el gobierno reaccionaron con lentitud a los problemas que afectaban a la zona en relación a los sismos que se venían produciendo desde hace un par de meses y que finalmente desencadenaron la tragedia que dejó, a lo menos, siete personas desaparecidas y tres muertos.
Chile es el único país del mundo en que le echan la culpa de un terremoto al gobierno. No es por defender a Bachelet, en absoluto, pues bastante me ha desilusionado la Gordi, pero es cierto. Me da rabia escuchar los comentarios del ilustrísimo alcalde de Puerto Aisén. Partiendo, porque por una cosa de respeto, decir que la presidenta se "vaya a la punta del cerro", no parece para nada digno del protocolo de un alcalde, en especial en casos como éste en que la frasecilla es pública. Segundo, él es alcalde de Aisén. Alcalde. ¿Por qué no se preocupó su ilustre municipio de establecer refugios, albergues, vías de evacuación, realizar simulacros, etc., etc., si era bastante lógico esperarse un desastre de magnitudes como las vistas este fin de semana? Ahora, si bien es cierto que es un asunto que incumbe 100% al gobierno, la presidenta y su gabinete no son las únicas autoridades con responsabilidad sobre ésto, en absoluto. En palabras del alcalde de Aisén, Bachelet "le ha faltado el respeto en forma mucho más grave, con sus acciones, con su conducta al pueblo, a la gente que hoy día se encuentra muerta".
Alto. ¿Qué acciones de Bachelet corresponden a una falta de respeto frente a las víctimas? Un desastre natural es algo impredecible. En el caso de Aisén era esperable, pero tampoco podía saberse con exactitud cuándo, dónde y cómo iba a ocurrir. Me imagino que se tomaron medidas, de hecho, estoy 100% segura de que se tomaron: el área estaba plagada de geológos, sismólogos, sismógrafos y demases. El caso se estaba analizando, y todos sabíamos que era un peligro inminente. El terremoto+pseudo tsunami se venía, sí o sí. Y el edil, como parte de sus funciones, debería haber también tenido medidas de prevención en caso de: informar a la gente, determinar zonas seguras, evacuar en caso de que fuese necesario. Pero ahora, le echa toda la culpa de las víctimas y de la tragedia a la presidenta, que se pega el pique hasta Aisén y más encima le faltan el respeto y le dicen que ahí ahora ya "no la necesitan". Palos porque bogas, palos porque no bogas. ¿Y si Bachelet no se hubiese aparecido? El escándalo sería que cómo es posible que la presidenta no esté ahí, con su pueblo, cuando éste la necesita.
Todo este cuento me suena a un oportunismo político horroroso y maquiavélico, que juega con la desgracia y el inmenso dolor de la gente. ¿Fue acaso culpa del gobierno que ocurriese un terremoto? No, ni del gobierno ni de nadie. ¿Fue culpa del gobierno que no se hayan tomado medidas suficientes? Tal vez. ¿Fue culpa del alcalde que la gente no estuviese lista para enfrentar un evento de este tipo? Muy probablemente.
Y, para terminar, me enerva seguir escuchando la denominación tsunami para lo que ocurrió en Puerto Aisén. Me da una sensación extraña. En Aisén no hubo un tsunami. En Aisén hubo un terremoto con desprendimientos de tierra que causaron olas de sus buenos 6 a 7 metros. Pero eso es muy distinto a un tsunami. No sé, me da una sensación extraña, casi como si quisieran decir en Chile también tenemos tsunamis. Digamos las cosas como son, lo que ocurrió fue de todas maneras un desastre terrible, pero no exageremos en la denominación...
Alto. ¿Qué acciones de Bachelet corresponden a una falta de respeto frente a las víctimas? Un desastre natural es algo impredecible. En el caso de Aisén era esperable, pero tampoco podía saberse con exactitud cuándo, dónde y cómo iba a ocurrir. Me imagino que se tomaron medidas, de hecho, estoy 100% segura de que se tomaron: el área estaba plagada de geológos, sismólogos, sismógrafos y demases. El caso se estaba analizando, y todos sabíamos que era un peligro inminente. El terremoto+pseudo tsunami se venía, sí o sí. Y el edil, como parte de sus funciones, debería haber también tenido medidas de prevención en caso de: informar a la gente, determinar zonas seguras, evacuar en caso de que fuese necesario. Pero ahora, le echa toda la culpa de las víctimas y de la tragedia a la presidenta, que se pega el pique hasta Aisén y más encima le faltan el respeto y le dicen que ahí ahora ya "no la necesitan". Palos porque bogas, palos porque no bogas. ¿Y si Bachelet no se hubiese aparecido? El escándalo sería que cómo es posible que la presidenta no esté ahí, con su pueblo, cuando éste la necesita.
Todo este cuento me suena a un oportunismo político horroroso y maquiavélico, que juega con la desgracia y el inmenso dolor de la gente. ¿Fue acaso culpa del gobierno que ocurriese un terremoto? No, ni del gobierno ni de nadie. ¿Fue culpa del gobierno que no se hayan tomado medidas suficientes? Tal vez. ¿Fue culpa del alcalde que la gente no estuviese lista para enfrentar un evento de este tipo? Muy probablemente.
Y, para terminar, me enerva seguir escuchando la denominación tsunami para lo que ocurrió en Puerto Aisén. Me da una sensación extraña. En Aisén no hubo un tsunami. En Aisén hubo un terremoto con desprendimientos de tierra que causaron olas de sus buenos 6 a 7 metros. Pero eso es muy distinto a un tsunami. No sé, me da una sensación extraña, casi como si quisieran decir en Chile también tenemos tsunamis. Digamos las cosas como son, lo que ocurrió fue de todas maneras un desastre terrible, pero no exageremos en la denominación...
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