domingo, agosto 17, 2008

Línea 5

Voy en este vuelo transoceánico,
oyendo tus versos melancólicos...

Tantos altibajos en mi cabeza últimamente, tantos que ya no sé qué pensar y hay ratos en que me gustaría sacarme las mechas a tirones, y otros en los que sólo quiero ser una bolita chiquita que quepa en esos brazos.

Nuestros hombros se tocaban pero mirábamos hacia lados opuestos. Tú croqueabas señoras, lolos y pokemonas, mientras yo observaba la infinidad de luces que es Santiago de noche, y una Luna llena gloriosa, en todo su esplendor. No sé qué habrás estado pensando tú, pero estabas serio y muy concentrado; probablemente no pensabas nada en absoluto y estabas totalmente entregado al lápiz bic azul, y a esa croquera que me estresa un poco a ratos. Lo que es yo, tenía pegadísima una canción que tiene que ver con viajes, y por un segundo pensé que habría sido buena idea andar con audífonos para poder escucharla. Pensaba en la obscenidad que son los malls, y en lo interesante que es estudiar a la gente con una visión externa. A ratos se me cerraban un poco los ojos; definitivamente las 3 horas no fueron suficientes, y tú no habías dormido absolutamente nada, ¿cómo no se te doblaban las rodillas? Veía tu reflejo en el vidrio, pero no te veía a tí: veía el lápiz correr sobre el papel. Y pensaba en todas las calles del mundo, con todos sus negocios del mundo y todas las cafeterías con trozos de torta baratos del mundo. Pensaba en un viaje trasandino, y en todo lo que tendríamos que caminar para verlo todo. Mi mente se echa a volar un poco, veo mi propio reflejo en el espejo y pienso en las ganas que tengo de escribir. Salir de noche y volver de mañana, salir de tarde y volver de noche; caminar de noche ya no es extraño en nuestras vidas, claro que yo no ando buscando trapitos rojos... o por lo menos no en el ámbito físico de mi existencia.

Y al final de horas de muchos lugares distintos, tú le haces caso a mi sonrisa y sonríes, y yo te hago cariño en el torso, por primera vez, según tú. Y yo te amo y tú a mí, y aunque nuestras mentes sean medio torbellinezcas-fractálicas-mandálicas, al final siempre caos más caos es, para nosotros, paz.

2 comentarios:

[ Je ] dijo...

Parece ser que es en los altibajos donde nos encontramos todos ahora.... en fin, no queda mas que (aunque no este) fingir capacidad de aguante.
babysteps, de a poco.

princess olie dijo...

He leído todos tus post y me he identificado con tus reflexiones y también he visto algo de lo que veo en Javiera con su juventud de mujer joven...
Creo, Fran, que en ti, en ustedes, radica la responsabilidad de darle a este planeta una mirada nueva para que dejemos de ser el ganado obediente que trabaja, produce, se endeuda y compra y empiece a descubrir mejores rutas...
Muchos abrazos, mucho cariño, mi lejana sobrina ya no tan lejana... :-)